Hey,
¿Te has preguntado alguna vez por qué paras de hacer scroll?
No me refiero a cuando decides dejar de mirar el móvil.
Me refiero a esos momentos en que, sin darte cuenta, tu dedo se detiene automáticamente.
Como si tu cerebro hubiera visto algo y dijera:
"Espera, ¿y esto?"
No es casualidad.
Tu cerebro está programado para detectar patrones.
Y cuando algo rompe ese patrón, se activa una alarma primitiva.
Es el mismo mecanismo que hacía que nuestros antepasados se fijaran en un movimiento extraño entre los arbustos.
Podía ser comida.
Podía ser peligro.
Pero seguro que era importante.
En Instagram, tu cerebro hace lo mismo:
Scroll, scroll, scroll... STOP.
¿Qué ha pasado?
Algo ha roto el patrón.
Puede ser:
Una imagen que no encaja
Una frase que suena rara
Un titular que contradice lo obvio
Un formato diferente al resto
Los mejores anuncios explotan este "bug" del cerebro.
No intentan ser perfectos.
Intentan “no encajar”.
Es como una estantería llena de libros negros y, de repente, uno fosforito.
Todos son libros, pero el fosforito te taladra el ojo.
Mañana te enseño exactamente cómo crear ese "libro fosforito" en tus anuncios.
Los patrones específicos que activan esa alarma primitiva.
—Javi
P.D.: Y si también quieres los prompts para que la IA los implemente automáticamente, suscríbete my friend.